Lo primero y más importante es dar las gracias a l@s que vais pasando por este pequeño espacio tan personal y especialmente a l@s que además dejáis un comentario ¡me hace tanta ilusión! Eso me anima a seguir, muchísimas gracias. Y ahora… al lío.
En la primavera del año pasado envié dos cartas más al Diario del Altoaragón o como lo llama mi amiga Patricia al Tebeo. Ambas relacionadas con mis colegas del clero. Iremos primero a la segunda de ellas enviada un 5 de Mayo en contestación a Don Olegario Viñuales que intentó engañarnos vilmente dejando de hablar con claridad en su escrito publicado a finales de Abril. Cuando la leí me dejó un regustillo a duda y sentí que me estaban intentando vender la moto así que buscando en varios diarios digitales encontré la noticia y días después lancé otro grito esta vez entonando un NO SOMOS IDIOTAS. Me abracé al sarcasmo en el título, lanzando con ese cebo la caña con la que seguro atraería al pececillo a leer mi carta. Este tipo no había sido del todo sincero y eso debía de saberse. La noticia es la que es. Luego están las opiniones, todas ellas respetables pero esconder tantos datos perturba gravemente la información del suceso.
La carta de Mayo (la última que si no recuerdo mal me queda por mostraos) no estuvo motivada por ninguna otra anterior. España y su reforma de la ley del aborto estaban de plena actualidad y fueron muchos los motivos que me llevaron a dar ese grito. Se lanzó aquella campaña del lince ibérico (que al final resultó ser euroasiático) por parte de los “man in black”, las asociaciones pro-vida no daban tregua y en cada edición de noticias tenían su espacio, la semana santa quiso ser utilizada como campaña antiabortista, en fin demasiada información contraria a mi propio pensamiento. No estoy en contra de que nadie se manifieste a favor de su ideología, siempre dentro de un marco legal, pero es que no entiendo que nuestra iglesia se meta en política. Da la sensación de que la derecha no puede sola y por este tipo de cosas es por las que el pueblo acaba haciendo la asociación “derecha-iglesia-retrógrados”. Es solo una valoración pero creo que mientras la derecha de este país no se suelte de la mano de Antonio María Rouco Varela nunca van a dar la sensación de avanzar, cosa que a mí personalmente me la trae al pairo y mucho. Lo que no consigo comprender es por qué narices no se hicieron estas manifestaciones durante los 8 años de gobierno popular exigiendo la retirada de la ley, o por qué el mismo gobierno no la retiró con su mayoría absoluta si tan en contra estaban, total un abuso más un abuso menos…
El título original era “Curas, linces y mujeres al borde de un ataque de nervios” quiero pensar que les pareció muy largo y lo acortaron eso si matando la esencia del mismo, pero la carta fue publicada a pesar de ser un poco más subida de tono que las anteriores.
Sigue habiendo muchas opiniones publicadas respecto al tema aborto, en alguna ocasión sentí ganas de contestar pero sería más de lo mismo. En este tema no hay medias tintas que valgan. Hasta que al “señor” José Ramón Gil le llegó la inspiración…y me tocó el alma. Pero eso será para otro día que por hoy ya no puedo continuar. De nuevo un placer teneos aquí, en la próxima entrada veremos y analizaré la carta censurada y quizá os adelante la última que prepare para el Tebeo, si es que la quieren publicar claro.
Besos a todos y a portarse bien este finde que os estoy viendo. ¡Gritad!
Aún hay gente que quiere oir tus gritos, leerlos. Mejor leerlos, que verlos, pero te empeñas en que se vean, y hay que verlos; y luego, te empeñas en que no se vean y no hay que verlos (rItMO). Como si alguna vez hubiera pensado en ver o en no ver. Y al final se despista alguien que no te conoce, y que pensó que eras otra persona. Y todo el secreto va en eso; repito... Alguien que ni conoces, ni vas a conocer, pero que admiró y gozó como escribías, y con tu mirada del mundo. No deberías defenderte de eso. Piensa que estás tú primero, y que hay más gente.
ResponderEliminarY si alguien debe irse...